La menstruación después de un embarazo

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Por norma general, la menstruación regresa entre las 6 y 8 semanas después de dar a luz, aunque puede tardar más si se está amamantando a bebé.

La menstruación después de un embarazo

Después de un embarazo, el cuerpo aprende a lidiar con los cambios hormonales por los que pasó en los últimos nueve meses. Se trató de un cambio corporal importante que provocó que el ciclo menstrual también tuviera alteraciones debido a las fluctuaciones de hormonas y neurotransmisores. Pero entonces, ¿qué pasa con la menstruación después de un embarazo y parto?

El cuerpo humano, principalmente el de un cuerpo menstruante, es resiliente. Requiere un poco de tiempo para regular las alteraciones generadas por el embarazo. Por norma general, la menstruación regresa entre las 6 y 8 semanas después de dar a luz, aunque puede tardar más si se está amamantando a bebé. Esto se debe a la prolactina que se genera durante el amamantamiento. Es importante señalar que la prolactina es la hormona encargada de la generación de leche materna, la cual se reprime durante la ovulación y la menstruación. De modo que en caso de dar pecho, la menstruación puede llegar después de algunas meses (¡y en ocasiones, hasta que se deje de amamantar!).

Después de un parto, la menstruación puede ser irregular

Si bien es verdad que el periodo puede regresar exactamente igual que previo al embarazo, existe una cantidad significativa de cuerpos menstruantes que el flujo, días de duración y síntomas del síndrome premenstrual pueden cambiar. Esto último puede llegar a suceder debido a que el útero crece de tamaño durante el embarazo y, aunque se encoge después del parto, su tamaño se ve ligeramente alterado. Por ello no habría que sorprenderse si al principio del regreso de la menstruación, el ciclo sea irregular. Es muy probable que las hormonas requieran un poco de tiempo en regularse para regresar a la normalidad (en especial si, como ya se mencionó, se está amamantando). 

No obstante, es importante recordar que, aunque no haya un sangrado, el ciclo menstrual continúa llevándose a cabo. Esto quiere decir que aunque el cuerpo se encuentre en proceso de volver a la normalidad, puede volver a embarazarse y descubrirlo de manera repentina. De hecho, hay ocasiones en que se puede quedar embarazada aún después de 6 semanas de dar a luz. Esto sucede dado que la ovulación continúa llevándose a cabo, aún si no existe un sangrado menstrual en sí. 

La menstruación post parto puede experimentarse de manera distinta previo al embarazo

Si bien el flujo puede ser abundante o los cólicos volverse casi imperceptibles, pero en caso de notar cambios significativamente intensos, es importante realizar una visita al doctor. Cuando hablamos de cambios, nos referimos a un exceso de cansancio que nos impide realizar nuestro día a día, dolores de cabeza que perduran todo el día, cantidades importantes del flujo (para vaciar la copa cada hora) o la ausencia del mismo después de tres meses de amamantar. 

La menstruación es un fenómeno natural que no puede ser visto como algo negativo, por lo que al normalizarla en nuestro día a día nos permitirá estar en un mayor contacto con nuestra salud en general.

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