En la actualidad siguen vigentes muchos mitos sobre la menstruación, los cuales terminan por afectar nuestra salud física, emocional y psicológica.
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Parece chiste pero es anécdota que a muchas de nosotras nos contaron que si teníamos sexo durante la regla, algo malo nos iba a suceder –o como mínimo, que era algo sucio y que a la pareja le iba a dar asco. La realidad es que todo eso que nos dijeron sobre el sexo y la regla es mentira. De hecho, como ya lo hablamos en nuestro artículo Masturbarse con la regla, la autoerotización y las prácticas sexuales durante la regla son sumamente benéficas para la salud.
En la actualidad siguen vigentes muchos mitos sobre la menstruación, los cuales terminan por afectar nuestra salud física, emocional y psicológica. Por eso, en Sensual Intim, tenemos la misión de compartirte la información basada en evidencia que romperán todos esos mitos. Conviértete tú también en la experta de tu menstruación.
De acuerdo con la investigación en Sexología, los orgasmos son un conjunto de reacciones fisiológicas y psicológicas que tienen un impacto –muy positivo– en la salud. Es decir:
El cuerpo es una suma increíble de reacciones fisiológicas. Sentimos lo que sentimos porque nuestro cuerpo desencadenó una serie de sustancias hormonales que regulan o alteran al estado de ánimo con el único fin de adaptarse de las circunstancias. La verdad es que es un curro inigualable.
En el caso del orgasmo, lo que hace el cuerpo es lo siguiente: Después de estimular un rato las terminaciones nerviosas de una zona erógena –dígase, el clítoris–, la musculatura del suelo pélvico tendrá contracciones para librerar la tensión que sintió durante el periodo de la excitación. A esto se le conoce como orgasto.
Ante el orgasto, el cuerpo reaccionará con una avalancha de hormonas. Por ejemplo, cuando la norepinefrina o adrenalina disminuya, la dopamina, endorfina y oxitocina irán en aumento. Esto producirá sensación de bienestar, cercanía y sueño –entre otras reacciones psicológicas que hablaremos a continuación.
Cuando el cuerpo se libera de tensión con las contracciones musculares del orgasto, lo que la mente está interpretando de esa experiencia –y sus reacciones fisiológicas– se le conoce como orgasmo.
Como mencionamos anteriormente, el cuerpo tiene reacciones hormonales que llevan a sentir sensaciones de bienestar, cercanía y sueño. Y las interpretaciones que surjan de estas sensaciones corporales –y en caso de que fuera alguna práctica sexual con otra persona, el cómo nos encontremos con ella–, definirán la experiencia de las reacciones psicológicas del orgasmo.
Y ojo, no todas las reacciones psicológicas son agradables. Existen disforias que pueden producir incomodidad, tristeza y vacío después de tener alguna práctica sexual con otra persona. E inclusive, se puede llegar a sentir culpa por haber lubricado o haber tenido un orgasto durante un abuso sexual. En caso de pasar por situaciones similares, te recomendamos visitar a una especialista que te acompañe en el proceso.
Lo que es importante de rescatar es que el orgasto/orgasmo libera una serie de hormonas como la dopamina y endorfinas. Ambas hormonas se encargan de brindar placer y disminuir el dolor – por eso, los orgasmos son ideales para combatir los dolores menstruales.
De acuerdo con los pueblos originarios mexicas, el orgasmo es el regalo [de consolación] de los dioses ante los infortunios de la vida. Y sospechamos que no estaban tan alejados de la realidad; ya que de hecho los orgasmos brindan una serie de beneficios a la salud de la persona que los goza:
Así como se promueve prácticas que faciliten la salud sexual con los orgasmos en la menstruación, es importante también señalar prácticas de riesgo que pueden afectar a la salud en general.
Tener sexo sin preservativos durante la regla puede ser una práctica de riesgo de contagio de ITS –tales como VIH/Sida–. De acuerdo con estudios, las prácticas sexuales de riesgo –las que implican tener sexo sin métodos anticonceptivos de barrera– tienen un alto índice de afectar a la salud mediante infecciones. Así que ya sabes: no te olvides del preservativo.
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Excelente explicación gracias